Mazón admite fallos en la respuesta a las lluvias torrenciales y pospone decisiones políticas hasta el jueves
El presidente de la Comunidad Valenciana, Carlos Mazón, ha reconocido públicamente que su administración cometió “sin ninguna duda” errores en la gestión de las lluvias torrenciales que golpearon duramente a la región y causaron grandes afectaciones. Sin embargo, Mazón ha optado por posponer cualquier decisión o anuncio político hasta el próximo jueves, día en el que intervendrá en las Cortes Valencianas a petición propia. Esta declaración, lejos de aliviar la tensión, ha generado críticas entre quienes consideran que el líder valenciano está tomando una postura evasiva en un momento en que la población espera respuestas inmediatas.
La gestión de la emergencia ha sido objeto de escrutinio, especialmente por la percepción de una falta de previsión y respuesta rápida durante el temporal. Las lluvias, que provocaron inundaciones en varias localidades y causaron daños significativos, han dejado a muchas familias en una situación complicada, sin recibir aún soluciones claras ni asistencia suficiente por parte del gobierno regional. La intervención tardía y la escasa información ofrecida por Mazón en estos días críticos han aumentado el descontento, especialmente entre los afectados.
A pesar de las manifestaciones que se llevaron a cabo para exigir su dimisión, el presidente ha evitado ofrecer soluciones concretas o señalar cambios en el Ejecutivo regional. “A partir del jueves se empezará a hablar de cuestiones políticas”, indicó Mazón, dejando entrever que los ajustes o posibles destituciones en su equipo de gobierno no serán inminentes. Esta falta de acción inmediata, en un contexto de presión social y demandas de transparencia, ha sido vista por algunos como una actitud poco responsable, especialmente en momentos de crisis.
En sus primeras palabras tras las protestas, Mazón expresó su «total respeto y empatía» hacia el dolor de los damnificados y aseguró que comprende la magnitud de la tragedia que atraviesan muchos valencianos. “Respeto profundamente el dolor, como lo hice en Paiporta y como lo hago cada vez que veo a los afectados reunidos”, añadió. Sin embargo, estas declaraciones, aunque reconozcan el sufrimiento de los afectados, no han venido acompañadas de medidas concretas que aporten soluciones, lo cual ha generado frustración entre los ciudadanos que esperaban un liderazgo más decisivo.
La falta de medidas y el retraso en asumir responsabilidades han colocado a Mazón en una situación delicada ante la opinión pública. Su intervención en las Cortes Valencianas el próximo jueves será clave para determinar si habrá cambios sustanciales en la estrategia de gestión de emergencias en la Comunidad Valenciana. Mientras tanto, la presión sigue aumentando, y la ciudadanía se mantiene expectante ante los pasos que el presidente y su equipo decidan tomar en los próximos días.
Paco Ciclón / AFPRESS
