La Policía Nacional detiene en Alicante a un trabajador que sustrajo 185.000 piezas de metal de la empresa por valor de más de un millón de euros
El detenido trabajaba en una empresa de fabricación de piezas de metal y aprovechaba su jornada laboral para sustraer material que luego revendía a otra empresa de compra-venta de chatarra
Las sustracciones se producían a diario y comprobaron que se venían produciendo desde octubre de 2020 resultando ser más de un millón de euros en material
Tras la investigación policial el presunto autor fue detenido por un delito continuado de hurto
30-julio-2023.- Agentes de la Policía Nacional han detenido en la localidad de Alicante a una persona por la presunta comisión de un delito continuado de hurto. El detenido, que trabajaba desde hacía ocho años en una empresa dedicada a la fabricación y comercialización de piezas de metal, había sustraído, presuntamente, desde el mes de octubre del año 2020 material por valor de más de un millón de euros que revendía posteriormente a otra empresa.
La investigación policial de la que se hizo cargo el Grupo de Delincuencia Especializada de Policía Judicial de la Comisaría Provincial de Alicante, se llevó a cabo tras la denuncia de la empresa perjudicada que, al realizar un inventario, detectó que estaba siendo víctima de sustracciones de material desde el mes de octubre del año 2020 y cuyo valor de lo sustraído ascendía a más de un millón de euros.
Según la empresa afectada, las sustracciones de material se producían de manera habitual y prácticamente a diario, por lo que decidieron instalar cámaras de seguridad para intentar determinar de qué manera estaba desapareciendo el material que faltaba en su inventario.
Una vez analizadas las imágenes de las cámaras de seguridad, se comprobó cómo un trabajador de la empresa, preparaba cajas de transporte con diversos metales, principalmente manivelas de latón y metales similares. Una vez reunida una cantidad de material suficiente, el trabajador, salía caminando de manera muy natural por la puerta principal y guardaba las cajas en el maletero de su vehículo que se encontraba estacionado en las inmediaciones de la fábrica.
Tras acabar su jornada laboral, el trabajador, cogía su vehículo cargado con el material sustraído y se dirigía a una empresa cercana dedicada a la compra-venta de chatarra donde lo vendía.
Con toda la información recabada por la empresa y aportada a la investigación, los agentes encargados del caso realizaron un dispositivo de vigilancia sobre esta persona para comprobar la veracidad de los hechos denunciados.
Así pues, en una de las vigilancias realizadas, los agentes pudieron observar cómo, efectivamente, el trabajador investigado, tras terminar su jornada laboral acudía a una empresa dedicaba a la compra-venta de chatarra.
Tras salir del establecimiento, fue interceptado por los investigadores, comprobando que portaba un albarán de venta que se correspondía exactamente con material que la empresa especificó en su denuncia que le sustraían.
Además de esto, de manera simultánea, se pudo comprobar que el material que el presunto autor había sustraído a lo largo de ese día y que había vendido tenía un valor de más de 2.500 euros, sin embargo, por su venta solamente obtuvo una ganancia de 115 euros.
Al no tratarse de la primera vez que ocurrían estas sustracciones y, ante la sospecha de que el investigado pudiera ser el autor de otras sustracciones de material en fechas anteriores tal y como refirió la empresa, los agentes, solicitaron de la empresa de compra-venta de chatarra las ventas realizadas por este trabajador comprobando que, a su nombre, se habían realizado unas 70 operaciones de venta por las que se le había pagado cerca de 4.300 euros.
Finalmente, tras cotejar tales registros con los registros de la empresa sobre el material que habían detectado como sustraído desde el año 2020 y que reflejaban la falta de cerca de 185.000 piezas de metal, valorado en más de un millón de euros, los investigadores detuvieron al trabajador como presunto autor de un delito continuado de hurto.
El detenido, de nacionalidad española y de 37 años de edad, fue puesto a disposición del Juzgado de Instrucción de guardia de Alicante.