CINE | LA BODA DE ROSA

Película de 2020, del género comedia costumbrista, dirigida  por  Icíar Bollaín e interpretada  por Candela Peña, Sergi López, Nathalie Poza, Ramón Barea y Paula Usero entre otros actores.

La idea del argumento de la película parte de una noticia, publicada en “The Guardian», titulada “Todo menos el novio”. La periodista se había desplazado a una agencia en Japón, donde una mujer se podía casar consigo misma. Este evento nipón consistente en fotos etc., carecía de compromiso personal. Sin embargo posteriormente se averiguó que había gente que hacía lo mismo en otros países y no sólo mujeres sino también hombres. Incluso se hace también en España, con cursillo prematrimonial incluido.

Ya enfilando la ruta de la madurez, Rosa se percata de que no ha cumplido sus propios sueños, al consagrar su existencia  a la asistencia de los demás . Rosa anhela emprender y tener su propio negocio, pero los planes de los suyos colisionan con este deseo.

En “La boda de Rosa”  destaca el personaje de Rosa, interpretada por Candela Peña, que con su desparpajo y saber hacer conquista a la cámara. Rosa es el eje central alrededor del cual orbita la acción.  Rosa es una  mujer  agobiada por las demandas de las personas a las que más quiere: hija, hermanos, amiga y pareja. Para Rosa su peor pesadilla es la realidad diaria, simbolizada oníricamente por una interminable carrera de obstáculos.

Rosa es una persona sobrepasada por sus obligaciones familiares, amorosas y laborales, a la que sus allegados(familiares, pareja, amiga) explotan, sin percatarse de ello. Finalmente Rosa logra  conquistar espacios de libertad.

Iciar Bollaín, se reinventa nuevamente, explorando una lectura crítica de la vida cotidiana y ensalzando el espíritu luchador frente a las adversidades, aunque en este caso las trabas sean más difíciles de superaR, porque proceden de los seres queridos: familiares, amigas y pareja . Hay una ineludible y notable diferencia de intereses entre las partes implicadas: círculo familiar y amoroso de Rosa y la propia Rosa.

La película trasciende lo costumbrista, para exigir una revisión de los roles asumidos tradicionalmente por ambos sexos: la mujer como cuidadora de la familia y el  varón, enfocado en el desarrollo de su carrera profesional.

La película incide también en el conflicto entre los deseos personales y las expectativas sociales e, igualmente, enfatiza la necesidad de labrarse un destino propio, sin ceder el terreno a las presiones externas.

Subyace  una simbología del color: el clásico traje de novia en blanco, símbolo de pureza, candidez y sumisión, se transmuta en un apoteósico y espectacular vestido rojo, expresión de la pasión por la vida, del vitalismo del personaje y de la rebelión.

En este film vislumbramos la evolución de Icíar Bollaín desde lo social (“Flores de otro mundo», “También la lluvia”, “Katmandú, un espejo en el cielo”…)a lo personal(“Yuli”, “La boda de Rosa”).  Puede interpretarse asimismo que Icíar integra lo personal en lo social en un ensamblaje perfecto.

TRAILER

 CRÓNICA: Beatriz Recio Inés