ORIGEN Y TRATAMIENTO DE LOS OJOS ROJOS
Quién no ha tenido alguna vez dolor, sequedad, ojos irritados, visión borrosa, pero realmente, qué es lo que causa esta situación y cómo hemos de reaccionar ante estos síntomas, es lo que vamos a tratar en esta artículo.
El término “ojo rojo” describe el ojo enrojecido o ensangrentado. El ojo inyectado en sangre suele ser un ojo inflamado e irritado, y lo mejor es que se busque la solución en el oftalmólogo.
Pero antes de llegar a ese extremo, hay otros pasos a seguir, remedios para este enrojecimiento, que aliviarán otros síntomas menos importantes, para obtener algo de alivio.
Pero ¿Qué es lo que provoca estos “ojos rojos”?
El enrojecimiento ocular es producido por los vasos sanguíneos dilatados e inflamados, que están situados bajo la conjuntiva traslúcida.
Estas diminutas venas pueden alterar su aspecto debido a problemas diferentes, derivados tanto de la forma de vida como enfermedades oculares determinadas.
El origen más habitual de irritación ocular es el derivado del estilo de vida o causado por el medio ambiente
- Los ojos secos debido al estudio o trabajo con ordenador. El parpadeo típico cuando se está delante de la pantalla, es uno de los reflejos al que estamos acostumbrados.
- Consumo de alcohol. El alcohol puede producir vasodilatación sanguínea, haciendo que los vasos sanguíneos sean más visibles y por tanto, los ojos se ven enrojecidos y cansados
- Las sustancias químicas volátiles originadas por el cigarrillo, como el amoniaco o el ácido sulfhídrico producen irritación en la mucosa sensible del ojo. Provocan sensación de niebla en la visión y aumentan el riesgo de cataratas. También lo sufren los fumadores pasivos. Incluimos aquí el humo que proviene del fuego, vapor de gasolina y disolventes
- Contaminación aérea. La presencia en la atmósfera de contaminantes como el combustible de los automóviles, que emana dióxido de carbono, es un problema que se agrava con el paso del tiempo y puede provocar daños graves en el órgano de visión
- Falta de sueño. El ojo abierto necesita una constante renovación de lágrima para su correcto funcionamiento, es por ello que el parpadeo es tan importante. Cada guiño limpia y renueva. La pérdida de sueño puede llevar al ojo seco. Si no duermes lo suficiente, aumenta la retención de sangre, lo que hace que el ojo aparezca rojo e hinchado
- A menudo, el picor y quemazón son causados por alergias. Polvo, ácaros y alérgenos suspendidos en el aire provocan alergia ocular. Determinadas cremas y maquillajes pueden producir el mismo efecto. Hay vasodilatación y el líquido se acumula. Como resultado, hinchazón
- El aire seco climatizado, las cabinas de los aviones, la exposición al cloro de la piscina, las lentes de contacto, el uso frecuente de determinados colirios, un arañazo o cuerpo extraño en el ojo hace que cambie su aspecto y provoque molestias.
El enrojecimiento causado por trastornos graves suele estar causados por enfermedades o infecciones, comunes o no
- Es la inflamación del borde inferior del párpado. Las glándulas se obstruyen. Causa frecuente de rojez, lagrimeo excesivo y dolor. La higiene es fundamental en este caso
- Es la membrana que cubre el párpado o conjuntiva la que está alterada. Puede ser viral o bacteriana, pero lo más frecuente son las conjuntivitis alérgicas. Además de enrojecimiento, hay sensación de cuerpo extraño dentro del ojo
- Uveítis. Aquí, lo que se inflama es la úvea, capa intermedia del ojo y parte muy sensible a infecciones. Causante del 15% de los casos de ceguera en países desarrollados, con lo que no hay que quitarle importancia.
- Inflamación de la episclera, parte más superficial del esclera (el blanco del ojo). Lo que se sucede es irritación y fotofobia, sensibilidad a la luz
- Lo que está dañado es el nervio óptico, asociado normalmente a un aumento de presión intraocular. Además de rojez, hay pérdida de visión periférica. Puede producir ceguera
- Hemorragia subconjuntival. Uno de los vasos sanguíneos se rompe bajo la conjuntiva, parte transparente que cubre la zona blanca. La sangre se extiende entre una zona y su envoltura. El aspecto es alarmante, pero no suele causar daño permanente
- Una lesión o traumatismo, una úlcera o infección vírica o bacteriana, una cirugía ocular reciente pueden también ocasionar estas molestias y rojeces
Tratamiento: ¿Qué hacer con los ojos rojos?
Es difícil hacer una valoración en la que entre todo en un solo tratamiento, por no decir imposible
En este artículo voy a hablar del ácido hialurónico como hidratante y reparador.
Según “official journal of the Association for Ocular Pharmacology and Therapeutics”, artículo publicado en nov. 2018, una administración única de lubricantes con ácido hialurónico, en pacientes con sequedad ocular y rojez en ojos produjo el efecto de disminución de los síntomas.
Se determinó el espesor de la película lagrimal. El estudio mostró que los síntomas mejoraron significativamente y se logró un tiempo prolongado de estos resultados
Este ácido actúa como humectante, creando una capa de hidratación en el ojo, así como lubricante, disminuyendo la fricción que produce el párpado al cerrarse. Neutraliza el envejecimiento de las células, sustituyendo el líquido eliminado por evaporación, asimismo aumenta la creación de colágeno
En el ojo rojo, el tejido lagrimal está alterado, la lágrima muchas veces no es suficiente para hidratar el ojo, debido a una excesiva evaporación, o a una escasa producción, dando lugar a al ojo seco, o xeroftalmia, y por ende, rojez ocular. El ácido hialurónico garantiza la defensa de la superficie del ojo al tiempo que repara las células superficiales.
Artículo escrito por María José Hidalgo, Licenciada en Farmacia y Doctora en Medicina. Fundadora del grupo de Farmacia María José Hidalgo en Alicante y Elche.
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